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Este es solo el comienzo. Estaba claro que muchos profesores querían tener una buena conexión inalámbrica. Me animé a implementarla por las diferentes maneras en las que se puede utilizar la red de Meraki.
director de Servicios Digitales de Langley School
Langley School es un centro educativo mixto y con internado para estudiantes desde los 6 meses hasta los 18 años, ubicado en Norfolk, Reino Unido. {www.langleyschool.co.uk/}
Langley School es un centro educativo privado ubicado al este de Inglaterra que alberga a 765 estudiantes regulares y de internado. Los padres eligen Langley por diferentes razones como su excelencia educativa, los terrenos de 40 hectáreas de campo o los valores de la escuela, como gentileza, confianza, curiosidad e integridad.
Hasta no hace mucho, pocas personas calificaban con una buena puntuación a Langley por su conectividad de red. La escuela, que ocupa dos terrenos en las afueras de Norwich, no tenía una conexión Wi-Fi funcional. Aunque había un ordenador en cada aula, solo era posible acceder a Internet a través de una de las trece salas de IT disponibles para los estudiantes.
“La tecnología no se consideraba esencial para brindar una buena educación”, indicó Sam Youngs, director de Servicios Digitales de Langley School. “La conectividad en las ubicaciones rurales normalmente era solo de 3G y solo podíamos acceder desde las salas de IT”.
La pandemia cambió todo: para muchos estudiantes, la educación se volvió remota y Langley tuvo que analizar su capacidad, no solo en las salas del colegio, sino también pensando en eventos, como la Noche de Padres, que tuvo llevarse a cabo de manera virtual. Rápidamente, desde la escuela se reconoció que se necesitaba un nuevo nivel de flexibilidad y que una mejora en la red era clave para construir un enfoque moderno del aprendizaje.
“El futuro llegó muy rápido”, comentó Youngs. “Necesitábamos la red con el fin de ofrecer nuevas posibilidades para la escuela, la enseñanza y los estudiantes”.
Anteriormente en Langley se habían establecido prioridades de presupuesto y eso generó una inversión insuficiente en la red, según indica Youngs. Debido a la importancia estratégica de la modernización, la escuela tuvo que considerar la implementación de una solución a largo plazo.
“Analizamos varias posibilidades, pero mi experiencia con Cisco Meraki me dio la confianza para saber que Meraki sería la mejor opción. Como el equipo es pequeño, quería una solución que fuese fácil de administrar sobre la marcha y que pudiera escalarse a redes nuevas según la necesidad”, explicó. “Debíamos evitar tener una configuración compleja y múltiples redes de área local virtuales (VLAN)”.
La solución de Meraki se basa en puntos de acceso inalámbrico MR y conmutadores de la serie MS con un contrato de licencia por 10 años. Esto garantiza una conectividad Wi-Fi en ambos sitios, tanto en el exterior como en el interior.
“Éramos conscientes de que la inversión era grande, pero también sabíamos que Meraki era la mejor opción”, cuenta Youngs. “Nos da una solución a largo plazo, sin importar cuánto crezca la red”.
El impacto es transformador. Langley pasó de ser un lugar donde la conectividad era restringida a ciertas salas, a poder brindar una experiencia inalámbrica flexible en todas sus instalaciones. El personal docente y los estudiantes ahora pueden trabajar con sus tabletas y laptops, y las clases se dan en exteriores. Todo esto se logró sin perder el control ni la supervisión.
“Ahora podemos escalar a una red nueva para un grupo de usuarios diferentes de forma rápida”, comenta Youngs, “cada una con un nivel de acceso, ancho de banda y seguridad únicos”.
Por ejemplo, Langley puede ofrecer un acceso a la red más abierto para los estudiantes de sexto (mayores de 16) y controlar a los usuarios menores. El personal docente y el operativo tienen sus propias redes y Youngs también puede proveer una red para los visitantes o invitados que reserven alojamientos fuera del ciclo lectivo.
Debido a que hay límites claros y políticas aplicadas, la escuela tiene más confianza en el momento de explorar sus posibilidades. Alientan al personal docente a que busque los estilos de trabajo que les resulten más apropiados, ya que no hay una única línea sobre cómo llevar una clase. A partir de abril de 2022, desde tercer año, todos los estudiantes recibirán dispositivos. Nos cuenta Young que, con una red sólida en funcionamiento, su rol es apoyar al personal y a los estudiantes, y explorar todo lo que es posible.
“Este es solo el comienzo. Estaba claro que muchos profesores querían tener una buena conexión inalámbrica. Me animé a implementarla por las diferentes maneras en las que se puede utilizar la red de Meraki”.
Entre las ideas que se planean implementar en Langley se incluye proveer contenido de enseñanza en una ubicación, donde los estudiantes puedan acceder al material en áreas específicas, y acceso delimitado a la red. La red también permitirá que Langley aloje a los profesores que den sus clases desde el extranjero en las aulas y extender así la excelencia educativa de la institución. Youngs también tiene pensado implementar sensores para monitorear el entorno en donde están ubicados los equipos. Los sensores de Meraki alertan en caso de temperaturas excesivas, humedad y situaciones similares. “Tenemos un equipo pequeño”, dice. “Todo lo que ayude a mejorar la administración de las instalaciones es útil”.
En el caso de los estudiantes en el internado (y un gran porcentaje de estudiantes extranjeros), la red se puede utilizar para contribuir a su bienestar. El seguimiento de la ubicación puede identificar a los estudiantes en todas las instalaciones y las aplicaciones pueden usarse para ayudar a los estudiantes a controlar su salud mental.
“Una de las diferencias más obvias fue la posibilidad de que los estudiantes hicieran videollamadas con sus padres”, cuenta Youngs. “Antes hubiesen tenido que reservar una de las salas de IT. Hoy esas conversaciones son más espontáneas y privadas. Es crucial para el bienestar de los estudiantes y les da tranquilidad a los padres”.
“Espero que nuestro equipo [de IT] pueda utilizar los productos de Meraki para cambiar nuestras tareas y pasemos de ser simplemente un servicio de ayuda a un servicio que permita utilizar todo tipo de tecnología en el aula”, expresó Youngs. “Los estudiantes están utilizando tecnologías nuevas en todas las áreas de sus vidas, entonces ¿por qué no lo harían en Langley?”. Tras elegir Meraki, Langley School rápidamente pudo adaptarse a los cambios que trajo aparejada la pandemia. Debido a que se priorizó la educación remota para los estudiantes, fue necesario incorporar tecnología adicional para el cuerpo docente y la escuela. El objetivo es lograr que la experiencia de aprendizaje se extienda más allá de las paredes del aula.